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La temporada 2025 se ha convertido en un verdadero calvario para Nicolás Jarry. El tenista chileno no logra reencontrarse con su mejor versión y volvió a despedirse prematuramente de un torneo, esta vez en el ATP 500 de Múnich, tras caer en tres sets ante el francés Ugo Humbert (21° del ranking).
Jarry, actualmente ubicado en el puesto 58 del escalafón mundial, comenzó el duelo con señales prometedoras. Con un juego firme desde el fondo y un servicio sólido, logró imponerse por 6-4 en la primera manga, ilusionando con una posible recuperación de confianza y nivel competitivo.
Sin embargo, la reacción del europeo fue inmediata. Humbert aprovechó una serie de errores no forzados del chileno y logró un quiebre clave en el segundo set, que le permitió tomar el control del partido. El francés se impuso por 6-3, dejando al “Príncipe” sin respuestas anímicas ni físicas.
La tercera manga evidenció por completo la crisis que atraviesa el tenista nacional. Jarry fue quebrado en tres oportunidades, su servicio se volvió predecible y su lenguaje corporal reflejó la frustración de no encontrar soluciones. El parcial final terminó 6-2 a favor de Humbert, sellando la eliminación en poco más de dos horas de juego.
Con esta derrota, Jarry acumula cinco caídas consecutivas y apenas una victoria en toda la temporada. Su único triunfo data del pasado 17 de febrero, cuando superó al argentino Juan Manuel Cerúndolo en el ATP 250 de Buenos Aires. Desde entonces, no ha logrado superar ninguna primera ronda.
El momento que vive el chileno es uno de los más críticos desde su regreso al circuito tras la suspensión por dopaje en 2020. Aunque ha tenido destellos de buen nivel en los últimos años, como su destacada actuación en Roland Garros 2023, la presente campaña lo muestra sin confianza, errático y fuera de ritmo competitivo.
Desde su entorno aún no hay declaraciones públicas sobre este bajón deportivo, pero se espera que el cuerpo técnico realice ajustes urgentes para encarar los próximos torneos. La presión comienza a pesar, especialmente considerando los puntos que debe defender en la gira europea de arcilla.
Su próximo desafío será el Masters 1000 de Madrid, donde Jarry ingresará directamente al cuadro principal. Será una oportunidad clave para intentar revertir la tendencia negativa, recuperar su posición en el ranking y demostrar que aún puede ser competitivo en el más alto nivel del tenis mundial.