Colo Colo se prepara para conmemorar su centenario este viernes 19 de abril, pero el ambiente festivo se ha visto empañado por una serie de hechos trágicos que enlutan al club más popular de Chile. A los fallecimientos ocurridos en el duelo ante Fortaleza por la Copa Libertadores, ahora se suma la partida de una de sus hinchas más queridas.
Durante la mañana de este viernes se confirmó el fallecimiento de María Fernández Manosalva, conocida cariñosamente como “María Colo Colo”. Ícono del hincha fiel y apasionado, fue socia honoraria del Club Social y Deportivo Colo Colo y accionista minoritaria de Blanco y Negro. Su figura fue ampliamente reconocida por la comunidad colocolina.
María, que enfrentaba un cáncer terminal, falleció a solo un día del centenario exacto de la institución. En sus últimos días fue acompañada por su familia, quienes mantuvieron informados a los socios honorarios del club respecto a su delicado estado de salud. Su partida ha generado una ola de tristeza entre los seguidores del Cacique.
La historia de amor entre María y Colo Colo comenzó cuando era niña. Criada en un convento frente a un estadio, asistió a su primer partido ante Universidad Católica, en el que ambos equipos empataron 1-1. Desde entonces, se enamoró del equipo albo, cautivada por su camiseta blanca y su espíritu de lucha.
En una de sus últimas entrevistas, para el podcast Colo Colo Centenario, María recordó aquel primer encuentro con el club: “No tenía idea lo que era el fútbol en ese momento, pero me gustó Colo Colo, quedé hasta la fecha”. Con emoción, expresó su anhelo de vivir el centenario del club: “Espero llegar a los 100 años de Colo Colo”. Un deseo que, tristemente, no alcanzó a concretarse.
Durante décadas, fue una figura constante en el estadio Monumental y en las asambleas del Club Social y de Blanco y Negro. Participaba activamente en la vida institucional del club, exigiendo mejoras y defendiendo con firmeza la identidad colocolina. Su nombre se volvió sinónimo de compromiso con la causa alba.
Uno de los momentos que marcó su activismo fue cuando se remató la sede y el teatro del club. En ese entonces, María amenazó con quemarse “a lo bonzo” en señal de protesta. Afortunadamente, no concretó dicha acción, aunque sí dejó clara la intensidad de su amor por la institución.
La figura de María Colo Colo quedará grabada en la historia del Cacique como la representación del hincha incondicional. Su fallecimiento, tan cercano al centenario, será sin duda un símbolo de esta etapa de reflexión, duelo y memoria que acompaña las celebraciones del club más ganador del fútbol chileno.